Para tener un mejor ambiente no se requieren de granitos de arena, como la popular frase, ahora lo que se necesita es el compromiso de todos para reciclar las envolturas pláasticas que consumimos a diario, para con ellas fabricar ladrillos ecológicos. Este nuevo producto ecológico evita que los materiales plásticos, por acción de los rayos ultravioletas, se descompongan en partículas tóxicas que contaminen los suelos y cuerpos de agua, o que terminan en rellenos sanitarios.
Por eso apliquemos la nueva estrategia mundial para hacer realidad de construir algún día un parque ecológico.
Participar es muy sencillo. Deposite envolturas, bolsas y materiales plásticos en una botella plástica de dos litros y medio. Para no dejar espacios vacios se debe compactar fuertemente con la ayuda de un palo o elemento sólido que quepa y sea más largo que la botella. Al final la botella debe pesar aproximadamente 1 kilo.
Terminado el proceso, recoja varios y guárdelos en un lugar seguro que pasarán por su casa u oficina recogiéndolos o asesorándola como las puede utilizar.
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